Innovar y reinventar la arquitectura existente para adaptarla al cambio climático que está sufriendo nuestro entorno, y a la vez solucionar los problemas de espacio para vivir que genera el movimiento de personas, es una de las preocupaciones actuales en nuestro planeta. El terreno para construir nuevos edificios es cada vez más escaso y por ello se busca la rehabilitación, la renovación o la conversión de construcciones existentes en otras nuevas más sostenibles, más ecológicas, en definitiva, más amigables con el medio ambiente.