Ono y Hop no son un ángel y un demonio al uso y, por supuesto, tampoco son el anverso y el reverso de ninguna moneda. Puede parecer increíble, pero el uno no sospecha siquiera la existencia del otro, ya que jamás intervienen a la vez sobre la misma persona.
Ellos nunca se cruzan si no más bien se suceden, como el día y la noche. Por eso, la sola posibilidad de su coincidencia desencadenaría una avalan-cha de anomalías sentimentales de consecuencias imprevisibles.
Las Crónicas de Ono y Hop recoge, casi en su totalidad, las historietas publicadas en las revistas Idiota y Diminuto, Tos, Nosotros Somos Los Muertos, Sonic Comic, Benzina y en el libro colectivo Comix 2000.
Aunque no hace falta presentar a nadie a Javier Olivares, sí que es de justicia decir que es uno de nuestros mejores ilustradores y historietistas patrios. Colaborador habitual de El Mundo, Training & Development Digest, El Manglar y otros medios impresos, ha publicado entre otras para Media Vaca, Glenat, La Abadía de Monserrat y multitud de libros infantiles y juveniles para las más diversas editoriales. En tres palabras: ?un fenómeno, oigan?.