¿Cómo influyeron las pautas de consumo familiar en los mercados preindustriales? Con demasiada frecuencia se alude a que gran parte de la actual Castilla y León era entre 1750 y 1850 una economía al borde de la subsistencia y una rémora al crecimiento económico español, dado sus bajos niveles de demanda. Numerosos especialistas han constatado la disminución de los salarios reales e incluso la disminución de los niveles antropométricos en la sociedad castellana. En este contexto, ¿cómo encajaría un incremento del consumo en bienes duraderos y semiduraderos (textiles, bienes relacionados con el equipamiento del hogar, objetos personales, joyas y libros, entre otros) en las clases medias? Para el autor las razones del aumento hay que buscarlas en los niveles de renta e ingresos, en las tasas urbanización, en la profesión de los cabeza de familia, en la evolución de los precios relativos e incluso en un cierto desarrollo del ?sentido de lo doméstico? en los hogares. Tales afirmaciones se apoyan en documentación notarial procedente de la provincia de Palencia y en la utilización de una novedosa metodología para cuantificar el gasto en bienes de consumo. Este aumento en el consumo de bienes repercutió en mayor o menor medida en el proceso de industrialización español, en las redes de distribución y comercialización de productos y en los niveles de vida. Por tales razones, la visión económica sobre Castilla y León a finales del Antiguo Régimen debería cuánto menos matizarse.