¿Qué habría pasado si el hombre no hubiera inventado las armas? Pues nada, porque no las inventó el hombre, las inventó Dios. Estaban Adán y Eva en el Paraíso, sin inventar armas ni nada, comiendo manzanas, por hacer algo original, y va Dios y manda un ángel con una espada de fuego. Los pobres Adán y Eva no tenían ni idea de lo que era aquello. «¿Qué es eso, Eva?» «Es un arma.» «Ya, pero ¿es un arma blanca o un arma de fuego?»
De repente alguien dice: «Yo soy un amante de los animales. Me gustan los pájaros: voy a meter uno en una jaula». Luego al verlo se siente culpable y dice: «Pues? voy a ponerle un columpio». ¿Un columpio a un canario? Pero ¡no ves que no tiene brazos! Es como si le pones una guitarra y le dices: «¡Hala! Además de cantar, toca».
ATENCIÓN
Este libro es sólo para seres especiales. ¿Cómo saber si eres uno de ellos? Mira fijamente al halógeno más cercano y cuenta hasta veinte? Ahora cierra los ojos. ¿Sigues viendo la luz? Enhorabuena, puedes comprar este libro.