Una novela apasionante y divertida, siempre escrita desde la perspectiva de una niña judía, contada con la autenticidad y espontaneidad de una autobiografía. Lidia es encantadora, indomable y magníficamente libre de espíritu para su edad. Es una historia ambientada con fuerza en la Segunda Guerra Mundial y la niña sufre las consecuencias de esos terribles tiempos: ausencias, angustias, divorcio de los padres y camino lleno de esperanzas y miedos hacia la tierra de Palestina. Uri Orlev ha creado una verdadera y original protagonista, que se gana nuestra admiración y simpatía y que los jóvenes lectores van a querer desde el primer momento.