Francia, abril de 1625. En la polvorienta villa de Meung se cruzan los destinos de un joven gascón, una hermosa mujer y un misterioso hidalgo. Da así comienzo una de las mayores historias de aventuras jamás escritas. Una carta de recomendación extraviada es la responsable de que el impulsivo D'Artagnan se adentre, sin saberlo, en un mundo de intrigas palaciegas, luchas intestinas, traiciones, celos, capas y espadas en el que perseguirá su sueño de gloria. De paso, forjará una amistad inquebrantable encarnada en una divisa inolvidable: «¡Todos para uno y uno para todos!».
«No digo que no exista un personaje tan bien dibujado en la obra de Shakespeare como D'Artagnan. Solo digo que no hay ningún otro que me guste tanto.»
Robert Louis Stevenson