Un hombre que asegura llamarse Mr. White y ser norteamericano es arrestado por las autoridades suizas acusado de ser Herr Stiller, desaparecido en Zurich años atrás. Instado por su abogado defensor, escribe su vida en un diario, mientras asiste, alucinado, a un desfile de testigos de la identidad que niega: la mujer de Stiller, sus amigos, su hermano…
La base de este libro es filosófica, la negación de su personalidad por parte del hombre moderno, pero el revestimiento narrativo es un profuso tejido de historias increíbles salpicado de episodios pintorescos y tratado con un agudo sentido del humor; una combinación tan irresistible como provocadora.
No soy Stiller es una sátira implacable y «desde dentro» del mundo moral de la pequeña burguesía, esa sociedad de la que su Suiza natal es para el autor perfecto, impecable e insoportable dechado. Convertida en un clásico de la narrativa contemporánea, es una de las obras más representativas de Max Frisch, máximo exponente de las letras europeas del siglo XX.