Con el noble emperador Sanguinius gobernando desde Macragge, el Imperium Secundus se erige como un faro de esperanza solitario aun cuando las fuerzas del Señor de la Guerra continúan asolando el resto de la galaxia. Roboute Guilliman, todavía señor de Ultramar, ha convencido a su hermano de que Terra ha sucumbido y de que el misterioso Monte Pharos, ubicado en Sotha, es ahora la clave del futuro de la humanidad. No obstante, los Night Lords, los hijos crueles y despiadados de Konrad Curze, han estado vigilando desde las sombras y se han estado preparando para lanzar un ataque largo tiempo planeado sobre el mismísimo Pharos…