La vida a veces es complicada. Cuando era solo un bebé, pasé por un cáncer y, unos años más tarde, mi madre tuvo que marcharse de Ucrania para trabajar. Desde ese momento, aprendí que la vida podía ser muy dura, pero que, con fuerza y valor, todo se puede superar. Mis vivencias me han enseñado la importancia de amarme y confiar en mí misma para conseguir todo lo que me proponga.
En estas páginas voy a mostrarme tal y como soy, sin filtros.
Espero que todo lo que he vivido te sirva para encontrar las herramientas que te ayuden en tu camino y que te hagan plantearte la realidad que tienes delante de ti.
¿Me acompañas en el trip? ¡Es un viaje movido, pero con un montón de sorpresas!