En "¿Para qué sirve?" Sara Ahmed continúa el trabajo que comenzó en "The Promise of Happiness" y "Willful Subjects" tomando una sola palabra, en este caso, uso, y rastreándola por todas partes. La autora muestra cómo el uso se asoció con la vida y la fuerza en el pensamiento biológico y social del siglo XIX y analiza cómo el utilitarismo aportó un conjunto de técnicas educativas para moldear a los individuos dirigiéndolos hacia fines útiles. Ahmed también explora cómo los espacios se restringen a algunos usos y a algunos usuarios, con una referencia específica a las universidades. Sin embargo, señala el potencial del uso queer: cómo se pueden usar las cosas de formas para las que no estaban destinadas, o por aquellas personas para quienes no estaban destinadas. Ahmed plantea el uso queer como una forma de reactivar el proyecto del trabajo de la diversidad como una tarea cotidiana y minuciosa para abrir las instituciones a aquellas personas que históricamente han sido excluidas.