Aurelia es la primera princesa nacida en el reino de Renalten después de doscientos años, y su destino es el de cumplir un tratado por el cual debe casarse
con Valentin, el príncipe de Achleva y mayor enemigo de Renalt. Los rumores de un príncipe enfermo y cruel no cesan, y lo único que eclipsa la aprensión de Aurelia
hacia su inminente matrimonio es el temor a aquellos
que la matarían para prevenirlo.
Sin ningún recurso en Achleva y despojada de su identidad, Aurelia debe decidir si quiere entregarse a su nueva vida o luchar por la que ha perdido, al mismo
tiempo que se abre paso por los complicados lazos que la unen al enigmático príncipe, al inquieto fantasma de una antigua reina, y a una planta venenosa llamada
hoja de sangre.