El término “Holocausto Rosa” se refiere a la persecución de homosexuales por parte del Tercer Reich. En los campos de concentración nazis, el triángulo rosa (rosa Winkel, en alemán) era el símbolo utilizado para marcar a los hombres gais. Aunque numerosísimos aspectos de este periodo histórico se han estudiado profusamente, la represión de este colectivo sigue siendo el gran desconocido del horror nazi. Tal vez porque las víctimas sufrieron doble o incluso triple acoso: por parte de sus captores, de sus compañeros de prisión y, en muchas ocasiones, también de sus familias, lo que reforzó su aislamiento y contribuyó a silenciar su sufrimiento. La tortura y la delación provocaron estragos, lo que elevó el número de casos a 100.000. De ellos, 60.000 fueron a prisión y más de 10.000 fueron deportados a campos de concentración, la mayoría de los cuales murieron asesinados en campos de exterminio o a causa de las condiciones infrahumanas que padecieron en los internamientos forzosos. Ricard Huerta es artista visual y catedrático de Educación Artística en la Universitat de València. Es autor de libros y artículos en revistas especializadas en arte, creatividad, educación, patrimonio y estudios LGTBI.