La libertad es en realidad una caña de pescar donde Eneko ha insertado hábilmente el cebo de la realidad en sus anzuelos dibujados. Un cebo de cuestiones y reflexiones agudas sobre la libertad, en forma de dibujos gruesos y directos sobre las diferentes libertades que conviven en nuestro mundo. Dibujos eternos, sin caducidad, que no son esclavos de la circunstancia del hoy, si no dibujos libres, profundos e irreverentes. Eneko siempre ha dicho que el humor es una forma de alejarse de los problemas, y que lo que él pretende es que los lectores tomen distancia para observar los marrones con la perspectiva que no te da el día a día. Porque la perspectiva te da libertad de pensamiento y autonomía para tomar decisiones. Pero también porque, aunque en su trabajo diario toque temas de actualidad, siempre lo hace de tal forma que sus dibujos puedan comprenderse en cualquier momento, sin ser esclavos del hoy, y resulten tan libres, profundos e irreverentes como él.